Este proyecto fue enormemente divertido. Se trata de una reforma integral de un piso en el centro de Madrid, con gran libertad para la elección cromática, material y lumínica, por lo que pudimos plantear una propuesta atrevida, que inspirara un estilo desenfadado totalmente conectado con la personalidad de la clienta. Un proyecto de contrastes, que se mueve entre la neutralidad de alguna de sus piezas principales, con el atrevimiento pictórico y formal de otros elementos, así como el juego entre lo nuevo y lo recuperado, formando un conjunto estimulante y, al mismo tiempo, confortable.