Frente al paraje natural del Pantano de San Juan se proyecta una vivienda respetuosa con el entorno de alto valor ecológico. La arquitectura se adapta de manera articulada con el pinar manteniendo todos los árboles existentes en la parcela, entrelazando sus volúmenes a los espacios entre pinos. La vivienda se materializa utilizando la madera y piedra del entorno que, junto a los faldones inclinados de las cubiertas revestidas en junco, se integra de forma sutil con el paisaje. La fachada sur se abre con grandes ventanales hacia la linde que delimita los márgenes del embalse ensalzando así las vistas privilegiadas del lugar y orientando la vivienda de forma óptima. Así se maximiza la eficiencia energética de los sistemas pasivos.